¿Cómo la corrupción impide la movilidad social en México?

Sin importar la forma en que se presente la corrupción, o el origen y las motivaciones para ella, la movilidad social en México y en el mundo se ha visto profundamente afectada por aquellas prácticas que injustamente privilegian a unos cuantos a costa del bienestar de muchos.

Las consecuencias directas de la corrupción dependen de las circunstancias particulares, pero a final de cuentas implican una situación de inequidad, además de que reflejan la existencia de deficiencias de fondo en nuestros sistemas legales, sociales y políticos, lo cual explica en buena medida el bajo desarrollo económico y social en nuestro país.

Corrupción: fuente de desigualdades

Ya sea que se trate de una situación de compadrazgo, tráfico de influencias o impunidad, cada vez que se abusa de una posición de poder en beneficio de intereses particulares se está generando una condición de desigualdad de oportunidades.

Aun cuando se implementaran políticas públicas adecuadas para combatir integral y eficazmente los problemas de pobreza, educación, salud o trabajo que nos aquejan, la corrupción establece obstáculos que impiden la realización de las metas buscadas por esas políticas. La competencia de los individuos y sus méritos pasan a segundo término cuando se favorece a otros menos capaces con tal de obtener ventajas personales.

Esto no solo significa un desaprovechamiento del talento sino un desperdicio de recursos al tener que cubrir las deficiencias generadas por el favoritismo, con consecuencias no solo económicas sino también sociales, al fomentar la persistencia de la baja movilidad social en México y las brechas en la igualdad de oportunidades.

La implementación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) es una respuesta a la necesidad de frenar el abuso del poder público y de esa manera darle a la población la oportunidad de alcanzar un mayor bienestar dentro de un marco de justicia social. Los retos que el SNA enfrenta son múltiples y complicados pero los beneficios que representa lo convierten en una poderosa herramienta para impulsar a la movilidad social, sostenido en un cuerpo reglamentario que permite su actuación en todo el territorio nacional.

Estos esfuerzos han abierto las puertas para llevar a cabo acciones de combate a la corrupción en todas las esferas del poder público que sientan las bases para recuperar la confianza de la población en las instancias gubernamentales e impulsar una cultura de transparencia, como por ejemplo el establecimiento del Sistema de Evaluación del desempeño del trabajo legislativo, en cuyo Consejo Coordinador participará el Centro de Estudios Espinosa Yglesias junto a otros organismos, con el propósito de dar a la sociedad, de acuerdo al exdiputado Edgar Romo García, “una medición objetiva, justa y equilibrada de las actividades de los legisladores que, a su vez, puedan convertirse en exigencias, responsabilidades y mejores prácticas parlamentarias”.

Una sociedad libre de corrupción en todas sus dimensiones da paso a la movilidad social, convirtiéndose en un entorno de desarrollo social e igualdad de oportunidades.