¿Cuál es la nueva clase media en México?

La segmentación de las clases sociales involucra diferentes perspectivas, por lo que determinar los criterios que acoten la clase media en México requiere que se considere no solo el ingreso por persona sino también distintas variables indicativas del nivel de vida de las familias.

Estas características a su vez presentan diferencias regionales; la distribución de niveles socioeconómicos varía entre la población rural y la urbana, lo que hace necesario unificar a los diferentes estratos para obtener una definición más precisa de la magnitud de la clase media y evitar una clasificación simplista o engañosa.

La nueva clase media

Los criterios utilizados para determinar los umbrales socioeconómicos que delimitan las clases sociales varían también en función de los objetivos buscados, como es el caso de la medición de los factores que afectan a la movilidad social. La persistencia de las desigualdades, es decir la baja movilidad social, es explicada en buena medida por las brechas entre clases sociales. El análisis de las características de la población ocupada, su riqueza material y capital humano, cobra importancia dado que la movilidad social es mayor en las clases medias que entre las clases que se encuentran en los extremos.

Tomando en cuenta el nivel de escolaridad, la ocupación y la riqueza material neta, se puede identificar un grupo de personas que cuentan con alto capital humano pero baja riqueza relativa; ellas conforman lo que llamamos nueva clase media. Es en esta nueva clase media donde vemos los mayores índices de bienestar y desarrollo humano, lo cual es indicativo de la relevancia de reducir las diferencias entre los grupos de mayor y menor riqueza y de esa manera impulsar la movilidad social intergeneracional.

En términos generales, las clases medias son el sector más importante para el crecimiento económico de un país, tanto en economías emergentes como en las ya desarrolladas, y si consideramos el alto capital humano de la nueva clase media, las ventajas de apoyar la expansión de este sector se hacen obvias. A pesar de ello, el avance de las clases medias en México ha sido marginal; de acuerdo a los criterios del INEGI, la población de clase media tuvo un crecimiento ligeramente menor al 4% entre los años 2000 y 2010, para un total cercano a los 44 millones de personas. Para el caso de la nueva clase media, los cálculos elaborados por el CEEY indican que en 2014 la población en este grupo alcanzaba apenas 12 millones de personas.

La informalidad laboral, la baja tasa de crecimiento económico y la falta de inclusión financiera son algunos de los factores que obstaculizan el avance de la clase media. Esto se refleja en la disminución del ingreso corriente promedio trimestral por hogar entre los deciles V al IX de 2016, comparados con los de 2010, de acuerdo a la información de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2016. Aun cuando se observa un ligero incremento en el total nacional de 2016 con respecto a los totales de 2012 y 2014, las cifras muestran una reducción en comparación al total arrojado en 2010.

Las cualidades de las clases medias -en particular, el hecho de que tengan mayor movilidad social ascendente y que los logros de salud y educativos de los hijos sean relativamente independientes de los de sus padres- hacen que la expansión de estas sea un factor crucial para el desarrollo social y económico de México, porque dicha expansión contribuye significativamente a la reducción de la desigualdad que tanto afecta a nuestra nación.