Cielos nublados para los accionistas de aerolíneas

*Julio Serrano

Siempre que pienso en el negocio de las aerolíneas me acuerdo del chiste: ¿Cuál es la forma más segura de volverse millonario? Ser billonario y comprar una aerolínea.

Históricamente, la industria ha sido problemática en todo el mundo. Las quiebras son frecuentes. Es raro encontrar casos en los que inversionistas de largo plazo hayan ganado dinero. Aun así, a muchos les atrae el negocio. Me imagino que es seductor decir que eres dueño de una flota de aviones. Es verdad que en años recientes las líneas aéreas tuvieron un mejor desempeño, pero el coronavirus provocó que se volvieran a desplomar.

Pocas industrias han sido más golpeadas por la pandemia. De acuerdo con la Asociación Internacional de Transporte Aéreo, sufrirá pérdidas superiores a 80 mil mdd en 2020 a escala global. Y la recuperación será lenta. Pese a que las economías empiezan a reactivarse, muchos analistas estiman que las aerolíneas tardarán entre tres y cinco años para retomar la actividad que tenía precoronavirus. Veremos. Tecnologías como Zoom representan una amenaza. Aún después de que se encuentre una vacuna y sea seguro volar, mucha gente, en particular viajeros de negocios, preferirá mantener sus reuniones por computadora que tomar un avión.

En México, las perspectivas de la industria son especialmente sombrías. Mientras que en muchos países el gobierno ofreció generosos paquetes de rescate a sus líneas aéreas, en México se optó por no intervenir. Las consecuencias no deben sorprender a nadie. Aeroméxico, nuestra aerolínea insignia, tuvo que recurrir en Estados Unidos al Capítulo 11 (una forma de quiebra) para protegerse de sus acreedores.

La buena noticia, por lo menos para los viajeros, es que las cuatro aerolíneas del país seguirán operando en el futuro. Aeroméxico acaba de recibir un crédito por mil mdd por parte de un fondo americano. Interjet, que lleva acarreando serios problemas desde antes de que llegara el virus, espera una capitalización por 150 mdd. ¿Serán suficientes estos fondos para mantenerlas a flote? Lo dudo, sobre todo para Interjet. Pero en el corto plazo, ambas seguirán operando para beneficio de los consumidores. Las otras dos aerolíneas nacionales: Volaris y VivaAerobus, están relativamente mejor, por lo que tampoco parece que vayan a dejar de operar pronto.

Quienes no tendrán tan buena suerte son los accionistas de las aerolíneas. Las acciones de Aeroméxico han caído más de 60% en lo que va del año. Las de Volaris, 40% (son las únicas dos que son públicas). La dilución que tendrán los accionistas de Interjet ante la anunciada capitalización de 150 millones de dólares será significativa. De VivaAerobus no hay tanta información, pero podemos estar seguros de que los accionistas la están pasando negras.

Como ha sucedido tantas veces en el pasado, muchos accionistas perderán la camisa en las aerolíneas. Ojalá hubieran escuchado el chiste de arriba antes de invertir.

* Consejo Directivo del CEEY. Correo: [email protected]. Columna publicada originalmente en Milenio el 20 de agosto de 2020.