Mercado laboral y trabajo no remunerado de mujeres en tiempos de COVID-19
Estefanía Rodríguez Torres
Participante en la XI Escuela de Verano sobre Movilidad Social
Nos encontramos en medio de una crisis sanitaria que ha afectado significativamente la economía mundial, en el caso de México la caída del PIB en el trimestre correspondiente al confinamiento es histórica y puede traer graves rezagos en pobreza, desigualdad y empleo.
¿Qué pasa con las mujeres en una crisis económica? Hay evidencia que muestra cómo las crisis generan retrocesos en los avances logrados en materia de igualdad: se da una mayor intensificación en el trabajo doméstico y de cuidados no remunerado, así como en el sector informal (Gálvez & Rodríguez 2011).
Las desigualdades de género constituyen la brecha transversal más extensa en el mundo (PNUD 2020), hay una división sexual del trabajo, una brecha salarial significativa entre hombres y mujeres, además de que el trabajo doméstico y de cuidados no remunerado recae en mayor parte en mujeres.
De acuerdo con el Censo Económico del INEGI en 2019, la participación laboral formal de las mujeres destacó en los sectores relacionados a la educación, salud, servicios de alojamiento temporal, bebidas y alimentos y comercio al por menor. Esto tiene implicaciones importantes en la pandemia ya que las mujeres constituyen el 72.8 % de la ocupación en el sistema de salud (PNUD 2020). Lo anterior significa que son, en su mayoría, las mujeres quienes tienen largas jornadas de trabajo para afrontar la crisis sanitaria por COVID-19 y su riesgo de contagio es alto.
Por otro lado, la segunda fase de la pandemia en México registró la caída del IGAE más significativa en los sectores de servicios de alojamiento temporal y de alimentos y bebidas, así como en el sector del comercio al menudeo, -60% y -31% respectivamente (Esquivel 2020). Esta situación implica una contracción del empleo en ambos sectores que perjudica principalmente a mujeres por su participación económica en los mismos.
Respecto a la economía informal que se ha caracterizado por ser alta en México, de abril a mayo se registró un incremento de 4.1 % (INEGI 2020), en el caso de las mujeres la tasa de informalidad es 2.3 % más alta que de los hombres, cabe destacar que la informalidad tiende a generar vulnerabilidades tanto económicas como sanitarias.
El confinamiento no solo generó el cierre temporal de actividades económicas, también implicó el cierre de actividades educativas que en muchos hogares se ha reflejado en la intensificación del trabajo doméstico y de cuidados no remunerado, ya en los resultados de la última Encuesta Nacional sobre Uso del Tiempo se registró que las mujeres destinan 50.1 horas semanales a este tipo de trabajo, 32.5 horas más en comparación a los hombres (INEGI 2018), cifras que seguramente han incrementado en los últimos meses.
Desde cualquier ángulo, las mujeres salen perjudicadas en la crisis actual, sin importar si pertenecen a un sector formal o informal de la economía o si deben realizar trabajo doméstico no remunerado, las crisis económicas provocan la precarización del trabajo de las mujeres.
Poco a poco la economía necesita reactivarse y los hogares requieren ingresos para satisfacer el consumo de la canasta básica, sin embargo, la precarización laboral propia de cualquier tipo de crisis puede agudizar la brecha salarial preexistente a la pandemia, la falta de empleos y la necesidad de seguir en casa va a generar que la recuperación laboral de mujeres sea más lenta.
En ese sentido será importante que las políticas públicas encaminadas a la recuperación económica incluyan un enfoque de género para evitar retrocesos en la equidad de género en nuestro país.
Referencias:
Esquivel, G. (Julio de 2020) Los impactos económicos de la Pandemia en México.
Gálvez, M. L., & Rodríguez, M. P. (2011) La desigualdad de género en las crisis económicas. Investigaciones Feministas, 2, 113-132.
INEGI (17 de Abril de 2018) Seminario: La Agenda 2020 para el Desarrollo Sostenible y el seguimiento de sus objetivos en el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe. Santiago, Chile.
INEGI (30 de Junio de 2020) Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo.
PNUD (2020) Desafíos de desarrollo ante la COVID-19 en México. Panorama Socioeconómico. PNUD América Latina.