Foto: Path.mba
Incertidumbre Política y Crecimiento
Enrique Díaz-Infante Chapa*
Los problemas de gobernanza, a decir de la Encuesta sobre Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado de Banco de México (https://bit.ly/36RBpa2), lastrarán el crecimiento del país en los próximos 6 meses. El 31% de los encuestados ven a este factor -sólo abajo del de las condiciones económicas internas (44%)- como el que mayor impacto negativo tendrá en la recuperación económica. Es decir, a los problemas de crecimiento que traemos por el cierre de empresas y pérdida de empleos, ahora hay que sumar los de tipo electoral.
La economía se espera crezca al 3% en 2021. Esto no compensará la caída de 9% de 2020. México será de los países que menos crezcan en la región. Sin embargo, los inversionistas de capitales especulativos están tranquilos viendo como el Gobierno del Presidente López Obrador administra el deterioro y paga. Si bien no ven que se vaya a hacer una necesaria reforma hacendaria relevante, ven que la disciplina fiscal continuará, y eso les gusta. Saben que este Gobierno ya se comió gran parte de los ahorros y que ya no habrá excedentes de coberturas petroleras, ni mayor recaudación producto del crecimiento de la economía, pero lo ven pagando la deuda gracias a su combate a la evasión y elusión fiscal.
Están conscientes que la falta de crecimiento -por las malas políticas económicas y de salud de este Gobierno- está afectando la proporción deuda/PIB del país, pero sienten que la deuda es sostenible. Saben que el país está tirando dinero a la basura al “rescatar” a PEMEX y con sus programas asistencialistas/electoreros, pero ven que eso no afectará la capacidad de pago del país, en el transcurso del año. Por lo mismo, es que se han disipado los temores de una baja de calificación de la deuda soberana y de una eventual pérdida de grado de inversión del país en 2021. Eso, y el diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos -que sigue siendo atractivo para los capitales extranjeros- hace que el tipo de cambio se espera se mantenga en $20 pesos por dólar.
Dicho lo anterior, no deja de inquietarles los problemas de gobernanza que se vislumbran. La encuesta revela que al 15% de los encuestados les preocupa el tema de la política interna. Y es entendible. Lo que está en juego en las próximas elecciones son muchas cosas. Es el restablecimiento de los contrapesos legislativos para contener los intentos de la 4T para seguir con su proceso de destrucción y/o captura institucional, incluida la de los organismos autónomos. Es el tratar de atajar el proceso de apropiamiento del Estado por parte de los militares. Es el buscar evitar el restablecimiento de un modelo económico perdedor a partir del quebrado PEMEX y la maltrecha CFE.
¿Y cómo están las preferencias electorales? De acuerdo con la Encuesta de Mitovsky de diciembre de 2020 (http://bit.ly/3tAxkke), se espera una alta votación (62.7%) el próximo 6 de junio. Esta participación sería muy buena, considerando que será una elección intermedia y que estaríamos todavía en pandemia. La misma –de darse- ayudaría a mitigar el peso de las estructuras partidistas y de las clientelas electorales de Morena, a quien, por lo mismo, le conviene un mayor abstencionismo.
De acuerdo con dicha encuesta, sin mencionar candidatos ni alianzas (lo cual es muy determinante), Morena tendría el 28.4% del voto, el PAN el 14.9%, el PRI el 10.8%. Movimiento Ciudadano y PRD, 2.6% cada uno. Los partidos satélites de Morena (PT y el Verde) tendrán 3%, conjuntamente. De ser así, Morena y aliados mantendrían la mayoría en el Congreso, pero ésta sería relativa, no absoluta, lo cual les dificultaría hacer cambios constitucionales. Algo muy positivo para la certidumbre política y el crecimiento.
Todo lo anterior, es lo que está detrás de la incertidumbre política que, como parte de los problemas de Gobernanza, preocupa a los Especialistas en Economía del Sector Privado entrevistados por el banco central. Y no es para menos.
*Investigador del CEEY. Twitter: @ediazinfante. Correo: [email protected]. Columna publicada en Reforma el 10 de febrero 2021.