Desigualdad educativa y movilidad social

Brenda Bolaños Ramos

Participante XI Escuela de Verano sobre Movilidad Social

La educación es considerada como uno de los factores que posibilitan la movilidad social, a través de ella las personas no solo se desarrollan intelectualmente, sino también adquieren conocimiento y herramientas que les permiten ejercer plenamente otros derechos y libertades, lo que en conjunto les facilita integrarse al mercado laboral de manera satisfactoria y así alcanzar un nivel económico diferente al de su hogar de origen.

En México la cobertura educativa ha aumentado en los últimos años, sin embargo, la oportunidad de acceder a la educación no es igual para todos. Por una parte, la calidad y oferta educativa a nivel regional son unas de las limitantes para el acceso y el logro educativo: las regiones más urbanizadas tienen una mayor concentración de escuelas y diversidad de oferta educativa, a diferencia de las regiones rurales con una menor disponibilidad de escuelas en distintos niveles educativos; mientras que el desarrollo económico de las entidades federativas del país impacta no solo en la infraestructura de las escuelas, sino también en la calidad de la educación que ofrecen.

A nivel individual, las características del hogar de procedencia determinan en qué medida se puede acceder a la educación y el alcance de la trayectoria escolar. Algunos de los factores relacionados con el hogar de origen son:

  • El ingreso, el cual definirá la cantidad de recursos monetarios que la familia pueda dedicar a la educación de sus hijas(os) sin afectar otras necesidades.
  • El tamaño del hogar, en casos de pobreza, no todos las(os) hijas(os) pueden acceder a la educación o alcanzar el mismo grado de estudios, algunas(os) de ellas(os) deberán integrarse más temprano al mercado de trabajo, ya sea para completar el ingreso familiar o permitir que otro hermano o hermana estudie en su lugar, lo que provoca intermitencias en las trayectorias estudiantiles o deserción.
  • Los roles de género, a las mujeres desde temprana edad se les dan más cargas de trabajo doméstico que a los hombres, lo que interfiere en el tiempo que pueden dedicar a su desarrollo intelectual y profesional; asimismo, repercute en el apoyo que la familia les puede dar para empezar o concluir estudios profesionales o técnicos, ya que se les ve como futuras amas de casa o cuidadoras de los papás en la vejez. En contraste, los hombres cuentan con mayor apoyo, a quienes se les atribuye el papel de proveedor del ingreso dentro de los hogares.

El conjunto de características a priori que cada persona tiene no es lo único que afecta su trayectoria escolar, también lo son los prejuicios y estereotipos dentro de las escuelas, contra el tono de piel o la pertenencia a algún grupo étnico o comunidad indígena, las que pueden desmotivar el logro educativo. Lo anterior se convierte en un peso que se traslada de la educación al mercado laboral, dado que el grado y la calidad de la educación alcanzada son factores importantes en el inicio de la carrera laboral, la cual definirá, en gran medida, el grado de precarización laboral y movilidad social que pueda alcanzar una persona después de dejar sus estudios, entre otros factores.

Por lo tanto, se deben de crear las condiciones necesarias que garanticen no solo el acceso a la educación sino la permanencia y/o conclusión satisfactoria de los estudios, para que el logro educativo y posteriormente el logro laboral dependa de las convicciones y deseos de cada persona y no de las características de origen.

 

Referencias:

Becerra M., M. Delajara, R. De la Torre y D. Graña (2018) Educación y trabajo digno. Un camino hacia la movilidad social, México: Centro de Estudios Espinosa Yglesias. 

Blanco, E. (2014) «Interrupción de la asistencia escolar: desigualdad social, instituciones y curso de vida». En E. Blanco, P. Solís y H. Robles (Coords.) Caminos desiguales. Trayectorias educativas y laborales de los jóvenes en la Ciudad de México (pp.39-70). México: INEE y El Colegio de México. 

Solís, P. y E. Blanco (2014) «La desigualdad en las trayectorias educativas y laborales de los jóvenes de la Ciudad de México: un panorama general». En E. Blanco, P. Solís y H. Robles (Coords.) Caminos desiguales. Trayectorias educativas y laborales de los jóvenes en la Ciudad de México (pp. 21-38). México: INEE y El Colegio de México. 

El Colegio de México (2018)  Desigualdades en México 2018 (pp. 33-46). México:  El Colegio de México y Red de Estudios sobre Desigualdades.

2021-07-15T23:53:14-05:00