¿Cómo se puede impulsar la movilidad educativa en México?

La principal razón de la baja movilidad educativa en México es la inasistencia a la escuela de aquellos que se encuentran en edad escolar, que para la educación obligatoria en el año escolar 2016-2017 fue de cerca de dos millones y medio de jóvenes.[1]

Adicionalmente existe una alta tasa de abandono en el nivel medio superior, a lo que se suma el hecho de que casi una cuarta parte de los alumnos que terminan dicho nivel no se inscribe en alguna institución de educación superior, contribuyendo así al rezago educativo, entre otras cosas.

Un problema multidimensional y complejo

Los factores que afectan a la movilidad educativa en México son de diversas índoles: acceso insuficiente al sistema educativo, baja cobertura en el nivel preescolar, reducción del presupuesto e incluso la desaparición de diferentes programas educativos, deserción, asignación inadecuada de los recursos del gasto público, acceso diferenciado al sistema escolar (escuelas públicas y escuelas privadas), persistencia de la pobreza, acaparamiento de oportunidades por parte de los más privilegiados, influencia de la escolaridad de los padres y muchos otros, entre los que destaca la baja calidad en la educación.

A pesar de no contar con una definición estricta del concepto de ‘calidad educativa’, diferentes indicadores arrojan luz sobre la necesidad de atender este importante elemento con el propósito de contener la desigualdad y el rezago que genera. El bajo desempeño de los alumnos que terminan la educación básica incide en la tasa neta de matriculación (cobertura) del nivel medio superior y en la tasa de terminación, que para el ciclo 2015-2016 no alcanzó el 60%.

Esto por supuesto no es un problema exclusivo de México, como lo muestra el Objetivo 4 de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU, que aboga por una educación de calidad que impulse el desarrollo de las habilidades y capacidades de los educandos con un particular enfoque en la inclusión y la pertinencia de la educación, además de incrementar el acceso a esta.

Educación pública con calidad y equidad

En el capítulo 4 del libro El México del 2108 del CEEY se incluyen análisis y recomendaciones para la elaboración de políticas públicas que contribuyan a eliminar la desigualdad de oportunidades educativas y promover el desarrollo cualitativo en el sistema educativo.

Las tres principales condiciones que el CEEY contempla para las propuestas de políticas públicas son las siguientes:

•       Equidad en la asignación de insumos en el Sistema Educativo Nacional.
•       Gestión educativa y equidad.
•       Desempeño educativo y circunstancias de los educandos.

Estos tres temas integran de diferentes maneras soluciones a los factores arriba mencionados y permiten que se conserve una visión general del problema a la vez que se desagregan sus elementos y se desarrollen estrategias específicas e integrales.

La distribución equitativa de recursos para fortalecer el sistema, tomando en cuenta las necesidades particulares de las comunidades en mayores condiciones de marginación, la inclusión de incentivos para la participación de alumnos, docentes y padres de familia en la administración, más la capacitación de docentes y alumnos que permita elevar el nivel de desempeño de la población escolar permitirán reducir las inequidades y promover la movilidad educativa en México.

[1] Principales cifras nacionales. Educación básica y media superior. Inicio del ciclo escolar 2016-2017. INEE.