¿Cómo interpretar las encuestas presidenciales?
Durante los procesos electorales, desde antes del inicio oficial de las campañas, las encuestas presidenciales son tal vez las piezas de información más difundidas en los diferentes medios de comunicación y pueden tener un impacto importante en nuestra toma de decisiones, por lo que es vital interpretar correctamente qué nos están comunicando.
Uno de los puntos que debemos tomar en cuenta al revisar la información contenida en las encuestas es el hecho de que éstas muestran resultados con base en las respuestas de los entrevistados a una lista de preguntas, y siempre existe la posibilidad de que estas respuestas no presenten un panorama completamente realista, por múltiples razones. Las empresas encuestadoras profesionales y serias hacen uso de diversas metodologías que les permiten reducir los sesgos al máximo; los criterios para la elaboración de encuestas para elecciones en México están claramente indicados en el Reglamento de Elecciones del Instituto Nacional Electoral (INE).
Interpretar la opinión pública en las encuestas presidenciales
Los gobernantes necesitan conocer los puntos de vista y las preferencias de la población para poder orientar sus políticas y proyectos acorde al sentir de los ciudadanos, y las encuestas les proporcionan esa información. La opinión pública es un elemento integral de las democracias, la obtención y el acopio de las perspectivas de los ciudadanos y su posterior difusión y análisis le dan sustento a las políticas públicas y a las posturas del gobierno.
De manera similar, los sondeos que se realizan durante las campañas electorales nos dan la oportunidad de conocer la opinión de nuestros conciudadanos y contar con información que apoye nuestra toma de decisiones de manera objetiva, siempre y cuando sepamos interpretar los datos mostrados en las encuestas y distinguir cuáles encuestas están correctamente elaboradas y cuáles no, particularmente aquellas que se enfocan en el posicionamiento de los candidatos presidenciales en las preferencias de los encuestados.
Existe además otro punto importante que debemos tener siempre en mente: aun cuando las encuestas de intención de voto pueden mostrar una tendencia indicativa de los posibles resultados electorales, estas NO SON PRONÓSTICOS. Por un lado, las tendencias de intención de voto mostradas en las encuestas iniciales generalmente no reflejan las posturas políticas reales de los entrevistados y, por otro, determinar con precisión las probabilidades de participación electoral presenta problemas metodológicos difíciles de superar. Además, existe una serie de consideraciones necesarias para interpretar adecuadamente los datos contenidos en las encuestas publicadas.
Identifique las encuestas profesionales
Las empresas autorizadas para realizar y publicar encuestas durante las elecciones en México 2018 deben cubrir un número de requisitos exigidos por el INE, y los medios de difusión que publiquen estas encuestas están obligados a indicar la metodología usada y los parámetros que las integran, así como el nombre de la entidad que solicitó y patrocinó el trabajo. A este respecto, es importante hacer notar que existe un número de sondeos informales o sesgados que se filtran y se difunden a través de redes sociales sin estar controlados. Siempre verifique la fuente de la encuesta antes de tomarla en cuenta, y si la fuente no es confiable o no la encuentra, tome con cautela esa información.
No confundir la preferencia bruta con la preferencia efectiva
Las encuestas de intención de voto pueden presentar dos tipos básicos de información, entre otros: la preferencia bruta –que muestra de manera directa los porcentajes del sondeo a TODOS los entrevistados, incluyendo a los indecisos y a quienes no respondieron– es indicativa de quién ganaría la elección si se llevara a cabo en el momento de la encuesta; y la preferencia efectiva, que no toma en cuenta la “no respuesta” y redefine los porcentajes mostrados a través de diferentes modelos de cálculo para mostrar una aproximación a los resultados esperados el día de las elecciones. Es importante no comparar las preferencias brutas con las efectivas, ya que son indicadores diferentes.
Consulte diferentes encuestas y observe las variaciones
Revise los resultados publicados por las diferentes agencias que realizan las encuestas presidenciales 2018 en México para comparar los datos arrojados y preste particular atención a las diferencias. Los porcentajes mostrados por las encuestas bien hechas no deberán tener grandes variaciones entre sondeos de diferentes empresas: las tendencias serán similares. Algunos medios publican promedios de las encuestas que consideran más relevantes o mejor elaboradas, aplicando incluso criterios que les permiten reducir los sesgos propios de las casas encuestadoras y eliminando de esta manera las variaciones atípicas que podrían confundir al elector.
No ignore aquellas encuestas que no muestran resultados favorables para el candidato o el partido de su preferencia. Tanto los candidatos presidenciales como los partidos políticos y los electores, han mostrado una inclinación natural a no tomar en cuenta los sondeos que no son de su agrado; esto puede generar una desconfianza infundada en la elaboración de encuestas y afectar de manera indirecta la percepción de las tendencias mostradas en ellas: contraste la información antes de rechazarla.
La interpretación adecuada de las encuestas de candidatos presidenciales 2018 en México, entre otros factores, nos dará los elementos necesarios para emitir nuestro voto con base en una opinión sólidamente fundamentada.